Desde las epistemologías feministas se aborda el estudio de los cuerpos y las intersecciones y ensamblajes que se producen en las formas de ver, medir, clasificar y producir conocimiento científico partiendo de la alteridad. La investigación se aborda desde los estudios de Ciencia, Tecnología y Sociedad (CTS) y desde los estudios de Ciencia, Tecnología y Género (CTG). El objetivo es repensar las epistemologías feministas y formular una nueva propuesta de epistemología híbrida aplicable a determinadas prácticas y métricas socio-psico-biomédicas.
En proyectos anteriores del equipo, se pasó de un interés por las biotecnologías aplicadas sobre el cuerpo a las prácticas, saberes y colectivos que emanan de las propias categorías médicas. En este proyecto pretendemos una vuelta a los cuerpos en un acercamiento desde las epistemologías (feministas) y las intersecciones y ensamblajes que se producen en las formas de ver, medir, clasificar y producir conocimiento científico partiendo de la alteridad. La investigación se aborda desde los estudios de Ciencia, Tecnología y Sociedad (CTS) y desde los estudios de Ciencia, Tecnología y Género (CTG). El objetivo es repensar las epistemologías feministas y formular una nueva propuesta de epistemología híbrida aplicable a determinadas prácticas y métricas socio-psico-biomédicas.
Partimos de la hipótesis de que los cuerpos no son lugares cerrados, productos acabados de las prácticas científicas o tecnológicas, sino parte de un conjunto de actores en red, en el que los cuerpos no solo juegan un papel pasivo como receptores sino un papel activo en las prácticas, dándose cierto tipo de coproducción entre ambos. En especial proponemos aplicar nuestros análisis a las métricas (test psicológicos para determinar masculinidad/feminidad, genéticos de racialización, de reconocimiento facial, de asignación de edad, de asignación de sexo/género, etc.) que se aplican a los cuerpos sexuados, generizados, racializados y con diversidad funcional (discapacidad) y sus intersecciones. En efecto, la medición es una parte integral de la ciencia moderna, hasta el punto de que se considera un aspecto distintivo de ella. La salud se materializa a través de las prácticas de contar y medir cuerpos y compararlos con estándares. Los números ponen una distancia mesurable entre el observador y el observado para garantizar que los datos son fiables, replicables y rigurosos, práctica que le confiere autoridad. Pero la introducción de la medición en determinados ámbitos se está mostrando problemática. La información disponible sobre el proceso de construcción, adaptación y validación de escalas en salud es escasa, dispersa y, en algunos casos, incompleta; por ello cada vez es más necesario analizar los supuestos epistemológicos que les subyacen, la heurística, técnicas y procesos a través de los cuales las realidades cobran importancia y disponer de instrumentos de medida adecuados.
